miércoles, 6 de abril de 2016

Dios

Hay momentos en lo que siento miedo, aungustia, preocupación y ansiedad y me aterra que todo eso me haga caer de nuevo en una depresión profunda.
Me paso días tratando de evitar esas emociones, evadiéndolas buscando lecturas que me ayuden a pensar en positivo, diciéndome que no puedo volver a caer en eso, durmiendo más horas para no pensar, buscando no estar sola para no enfrentarme a esto y que de repente empiecen mis lágrimas a salir, viendo películas o desperdiciando el tiempo en facebook.
Me da miedo volver a sentir todo eso y luego reprocharme por sentir que nada de lo que he hecho me ha servido para avanzar, para ser mejor, para superar mis traumas o como sea que se llamen.
Pero pues, sé que es mejor que los enfrente, que no les tema, para que no se hagan más grandes.
Por ahí leí que muy probablemente una de las tareas más importantes que tengo que resolver en esta vida es mi falta de autoconfianza, mi falta de fe en Dios.
Creo que cuando mis papás se divorciaron yo ya no confiaba en él, no es que crea que no existe, sino que se me hace muy dificil confiar en un dios, después de lo mucho que he sufrido.
Me cuesta trabajo aceptar que Dios quiera y permita que uno sufra, que ocurran hechos que a uno le duelan, que no te explicas, que son injustos. Y esa parte no logro aclararla en mi mente, como para decirme a mi misma: sí dios te ama, te manda este dolor, pero es porque te ama.
No lo sé, eso me causa mucho conflicto y no me permite que yo confie en que todo saldrá bien, cuando eso no sucede todo el tiempo, sino, entonces yo nunca hubiera sentido todo lo que he sentido.
Tal vez dios sea como nosotros y a veces se equivoca o tal vez no, no lo sé. Quizá estaría bien que tratara de comprender un poco más a dios, que yo realmente no le llamo así, pero para fines de que otros me entiendan mejor por aquí, así le seguiré nombrando.
Yo me he equivocado miles de veces en mi vida y también he, con mis palabras y acciones, hecho sufrir a las personas que más amo, pero aún con eso, a mí me gusta recibir otra oportunidad para que confíen en mí, para que me perdonen y vuelvan a creer que puedo hacerlo otra vez y de una mejor manera. Quizá lo mismo debería hacer yo con dios, a lo mejor sería bueno que comenzará a amarlo y comprenderlo como ahora he comenzado a hacerlo conmigo misma.
No podré evitar que sufra o que los hechos que ocurran a mi alrededor puedan llegar a causarme dolor, no puedo evitar sentirme lastimada, en resumen, no puedo evitar que esas cosas que considero dañinas o negativas, causen en mí una emoción incómoda. Si dios las genera o no o si las permite o no, tal vez no pueda terminar de entenderlo a aceptarlo por completo, pero en lo que sí quiero creer es en mí: en poco a poco ese algo que me causa dolor o algo por el estilo, no me cause más dolor en algún momento, después de haber recorrido un largo camino, después de varias lágrimas y sobre todo, después de mucho trabajo en mi interior.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario